La Sierra de Cazorla, Segura y las Villas es un entorno de incalculables riquezas paisajísticas que se perciben a lo largo de todo su entorno natural y que además ha sido declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 1983, Parque Natural en 1986 y Zona de Protección para las Aves en 1987. Un privilegiado entorno donde el olivar sostenible de montaña es uno de los principales protagonistas.
El olivar sostenible de montaña representa un alto valor ecológico, pues situándonos en el parque natural protegido más extenso de España y segundo de Europa, ser respetuosos con el medio que nos rodea forma parte de nuestro ADN. Por eso mismo, el olivar sostenible en Cazorla permite mantener un equilibrio perfecto entre producción de calidad y conservación del patrimonio natural.
El paisaje del olivar es uno de los más reconocidos por aquellos que visitan nuestra localidad. Conforme los viajeros se adentran en nuestro bosque de oro líquido quedan sorprendidos ante su inmensidad y colorido sin igual. Sumergiéndonos en este paisaje es imposible no admirar tal belleza oleícola que acabará envolviendo nuestro paladar en su rica gastronomía, teniendo como aliciente los beneficios que aporta a nuestra salud bajo una cadena de producción responsable y comprometida con el medio ambiente.
¿Qué es un olivar sostenible?
Un olivar sostenible es aquel cuyas prácticas no implica un deterioro del medio ambiente, al contrario, su actividad es beneficiosa, ya que fomenta la biodiversidad en el entorno a través de prácticas y costumbres responsables con el ecosistema.
¿Qué implica tener un olivar sostenible en Cazorla?
Tener un olivar sostenible en Cazorla, implica una serie de prácticas adaptadas a la realidad de nuestro medio rural y respetuosas con la naturaleza que nos rodea.
Entre ellas encontramos la necesidad de:
- Emplear cubiertas vegetales protegiendo los suelos de la erosión.
- Utilizar abonos y productos para el control sanitario del olivar respetuosos con el medio y teniendo en cuanta las épocas apropiadas, respetando la flora y la fauna de su ecosistema.
- Dar un destino apropiado a los residuos obtenidos, así como aprovechar los restos orgánicos.
- Técnicas de aprovechamiento del agua en el trabajo de regadío.
- Clasificar, separar y tratar la aceituna según su procedencia y calidad.
- Realizar la recolecta y transporte de la aceituna minimizando daños y con la adecuada separación entre suelo y vuelo, para una correcta conservación de sus propiedades y peculiaridades.
- Adecuar los depósitos a las condiciones apropiadas de conservación y envase del aceite.
Entre otras prácticas, estas deben seguirse al pie de la letra para obtener un aceite de oliva sostenible y rico en propiedades oleícolas saludables. Recuerda que el aceite es un alimento imprescindible en nuestra dieta mediterránea y que la falta de higiene y cuidado en su proceso disminuye la calidad del mismo y afecta directamente a nuestra salud.
Por otro lado, en nuestra provincia el olivar es el principal motor económico que sostiene a miles de familias que ancestralmente se han dedicado a su cuidado y conservación. Les debemos un reconocimiento y respeto manteniendo las prácticas adecuadas y conservando esta tradición.
Todos formamos parte del equipo y tratamiento del olivar sostenible, de una forma directa e indirecta, y de ahí la necesidad de un compromiso social para mejorar nuestro modo de vida y su calidad.
El olivar sostenible en Cazorla no sólo es la clave en la calidad de nuestros AOVEs, sino que también es una muestra del gran valor patrimonial de nuestro paisaje.